Cómo escribir postulaciones a fondos para periodistas

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Solicitar fondos y becas es más que una tarea difícil. Es un proceso. Este tipo de iniciativas requiere muchos componentes: presupuestos, propuestas e información de contacto, solo por mencionar algunos.

En un momento en que estas convocatorias se convierten cada vez más en una fuente fundamental de dinero para las redacciones, periodistas y profesionales de medios de comunicación deben aprender cómo escribir estas postulaciones. Porque, sobre todo, son un género en sí mismo. Tienen sus propias reglas, una estructura especial y un lenguaje distintivo. Pero es una habilidad que se puede aprender.

Así que aquí van 10 consejos para superar el miedo al formulario en blanco y escribir una presentación sólida.

1. Leer los términos y condiciones 

Comencemos por el principio: viste un nuevo programa o iniciativa que solicita solicitudes. ¡Excelente! Eso significa que hay una oportunidad que podés aprovechar. Pero el primer paso es leer los términos y condiciones del programa. En esa sección, descubrirás si sos elegible para recibir los fondos y eso te evitará cometer errores en el proceso. 

Este tipo de documento también establece expectativas sobre el programa, como el objetivo establecido por la organización que otorga la subvención o el período en el que acepta solicitudes. Leelo detenidamente y tomá notas (mentales o en papel, lo que sea mejor para vos).

2. Leer los criterios de selección

Ahora que sabés que sos elegible para la subvención y sabés qué esperar del programa, el segundo paso más importante es leer los criterios de selección. Esto te dará una idea de lo que la organización otorgante espera recibir como parte de las solicitudes. ¿Hay algo considerado como preferencia? Entonces tomá nota de eso, porque si eso se aplica a vos, probablemente lo vas a necesitar incluir en tu presentación.

Los criterios de selección explican los factores que el otorgante o el evaluador considerarán al leer tu solicitud, por lo tanto, asegurate de que tu envío cumpla la mayor cantidad posible de criterios.

3. Entender claramente el objetivo del programa

Este aspecto es crucial. Si comprendés lo que la organización que proporciona una subvención está tratando de lograr con su programa, entonces será mucho más fácil para vos presentar un proyecto que alineado con ese objetivo. ¿Es un fondo centrado en innovación? Entonces asegurate de que tu propuesta esté relacionada con eso. ¿Es una subvención para la transformación digital y tu organización justo quiere actualizar su infraestructura tecnológica? ¡Entonces son tal para cual!

4. Planificar la solicitud

La redacción de la postulación no es algo que se hace una tarde con el impulso de una taza de café. Se necesita tiempo para preparar una propuesta. Tomate un tiempo para leer el formulario de solicitud, hacé una lista de todas las cosas que necesitarás enviar y comenzá a planificar tu envío. 

No tomes atajos. Algunos campos pueden ser opcionales, pero no los subestimes. Siempre es mejor proporcionar toda la información necesaria para darle al evaluador la idea más completa de tu proyecto.

5. Tener un objetivo específico

Una propuesta vaga es probablemente el error más común que cometen las personas al solicitar una subvención o una beca. Además, muchas propuestas establecen demasiados objetivos y carecen de enfoque. Pensá que los evaluadores van a leer cientos de aplicaciones como la tuya. Tenés que lograr que tu propuesta se destaque y la única forma de que eso suceda es proporcionar una idea clara de lo que querés hacer. Elegí solo uno o unos pocos objetivos y describilos concretamente. Acá van algunos ejemplos:

Si estás solicitando una beca para un reportaje, decir que querés cubrir pobreza como tema no es suficiente. Las organizaciones siempre quieren saber algo más específico. ¿Pobreza dónde? ¿A quién afecta? ¿Por qué es relevante tu idea? Tenés que dar los detalles que vuelven único a tu proyecto.

Si buscás ser parte de una aceleradora, ¿cuál es el proyecto que te gustaría desarrollar? No basta con que digas "implementar un modelo de suscripción", sino además que tendrías que proporcionar, por ejemplo, una idea de la necesidad de ese modelo y de cómo encajaría en la estrategia de tu organización. Las presentaciones a fondos son, en definitiva, un formato argumentativo. Así que fundamentá tu caso.

6. Contar una historia

Incluso cuando este tipo de solicitudes tiene su propia estructura y estilo, no deja de tener una historia detrás. Y como periodista, debés tener eso en cuenta. Pensá en la forma en que le presentarías esto a un editor. ¿Qué querés hacer con la beca? ¿Cómo planeás hacerlo? ¿Por qué sos la persona más adecuada para llevar a cabo el proyecto? (O la organización más apropiada para hacerlo, si el fondo es para un medio). Contale a la gente por qué sos especial.

7. Demostrar que se puede lograr los objetivos.

Este es uno de los conceptos más importantes. Tu propuesta siempre debe tener algún tipo de indicadores clave de rendimiento (KPI, en inglés). Esto mostrará que la pensaste y tu idea no salió de la nada. En este paso, debés decirle a la organización otorgante algunas cosas.

Primero, describí cómo te imaginás el éxito en tu propuesta. Los KPI son una forma de medir ese éxito. Pero esos KPI deben estar relacionados con la naturaleza de tu idea. Por ejemplo, si tu organización desea lanzar un podcast, no tendría sentido medir el éxito por un incremento en la circulación diaria de tu periódico. Un enfoque correcto tomaría en consideración las métricas relacionadas con los podcasts. ¿Querés ser el podcast número 1 en una lista? ¿Querés tener una cantidad específica de descargas cada mes? Incluí eso en tu solicitud.

8. Tener un presupuesto

La mayoría de las subvenciones solicitan un presupuesto y hay una muy buena razón para ello. Al igual que los KPI, un presupuesto muestra que, incluso si no sabés exactamente cómo resultarán las cosas, te preparaste para realizar este proyecto. Sabes aproximadamente cuánto costará todo. Para los evaluadores, esto es una indicación de que tenés esto planeado.

9. Anticipar tu impacto

Los efectos de una iniciativa pueden ser medidos de muchas formas. A veces vas a prestar atención a las métricas y ver que tus proyectos ayudaron a tu organización a incrementar su alcance. Tal vez veas un crecimiento en el número de personas suscriptas gracias a un proyecto que le encantó a tu audiencia.

Cuando hablamos de becas o fondos, el mejor resultado en última instancia es el impacto. Esto se puede definir como un cambio positivo en el mundo que fue posible gracias a los fondos que recibiste. Cuando estás escribiendo una postulación, deberías siempre mostrar que estás anticipando el tipo de impacto que tu proyecto podría tener. Para eso, tratá de responder estas preguntas: ¿Cuál es la diferencia que va a ver tu comunidad a raíz este trabajo? ¿Quién se va a beneficiar y cómo?

10. No renunciar

Si ya te rechazaron en algún programa, sabes que puede ser una experiencia desalentadora. ¡Pero ahora en realidad podés aprender de tus errores y prepararte mejor para la próxima oportunidad! Se necesita práctica. ¡Y dejá a un lado la timidez! Si tenés alguna pregunta sobre el programa al que deseás postularse, simplemente preguntale a las personas que trabajan en él. Estarán encantadas de ayudarte y orientarte. Después de todo, están haciendo esto por vos.